El pasado 08 de marzo celebramos el Día Internacional de la mujer, es oportuno reflexionar sobre un tema que afecta a gran cantidad de mujeres, como es la violencia de género. En el año 2011 en el estado Nueva Esparta se registraron aproximadamente unos 2600 casos de violencia de género, cifra que resulta alarmante, tomando en cuenta que hay muchos casos que la víctima no se atreve a denunciar.
La abogada Cristina Conti, presidenta de la Fundación Nueva Mujer Margarita, es una de las principales promotoras en la lucha contra la violencia de género en el estado Nueva Esparta y señaló con preocupación que durante dos años y medio han brindado atención a 193 mujeres con situación de maltrato y 54 agresores, lo que representa un bajo porcentaje de los casos registrados. “Todavía no hemos conseguido la suficiente cooperación de los órganos receptores, (Fiscalía, prefectura, policía, guardia, etc.) quienes están obligados a referir a las mujeres agredidas a los centros especializados para que reciban la respectiva orientación y atención, como lo establece el artículo 87 de la ley orgánica sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia. Esto no es un capricho ni una ayuda, es una obligación establecida en la ley, es una de las medidas de protección. La violencia contra la mujer no se resuelve solo con una ley, tiene que haber todo un proceso de rehabilitación tanto de la víctima como del agresor y eso se logra con atención psicológica y psiquiátrica.”
En este sentido, la psicóloga Noraida Matos, señaló que cuando la víctima acude al centro de atención se le proporcionan las herramientas para retomar su vida y se estabiliza emocionalmente: “Manejamos la autoestima, las ganas de seguir viviendo les enseñamos a ser felices, les hacemos ver que tienen derecho a vivir en paz libres de maltrato y el 99 por ciento de las mujeres salen restablecidas, con otra visión de la vida. También tratamos al agresor y se intenta la terapia de pareja para enseñarlos a convivir y en algunos casos hemos logrado que cambien”.
La abogada Delia Castillo, asesora legal de la Fundación Nueva Mujer, dice que le hacen el seguimiento a cada caso y se muestra muy satisfecha cuando ve los resultados obtenidos en las víctimas que acuden en busca de ayuda. “Es impresionante ver el antes y el después de una mujer maltratada que viene aquí. Tenemos el caso de una mujer que llegó amenazada de muerte, con un estado depresivo avanzado, sin hogar, incluso solo tenía la ropa que llevaba puesta y hoy por hoy, luego de 7 meses de atención, está creando su propia ong para ayudar a otras mujeres en su comunidad”
Agregó Conti que en el mes de abril, la Fundación Nueva Mujer Margarita abrirá un nuevo Centro de Atención en la planta baja de la prefectura del municipio Mariño, en Porlamar, que además es el municipio que registra mayor número de víctimas. Igualmente se realizarán talleres en los órganos receptores para estrechar relaciones y se continuará con los talleres permanentes en comunidades y centros educativos como estrategia de prevención.
La ley no basta, hay que cumplirla
A juicio de Cristina Conti, la impunidad es otro de los factores retarda la solución de los casos, “De nada vale brindar atención a la víctima si luego el tribunal no decide, existen demasiadas causas para una sola fiscalía que tenemos en el estado, lo que origina un excesivo retardo procesal y esto hace que la víctima desista y recaiga emocionalmente”
La situación de abandono, también es considerada como un tipo de violencia. “La mujer abandonada por la pareja, queda con toda la responsabilidad de los hijos lo que genera una carga económica con la cual no puede cumplir y en este particular la ley no la esta apoyando. Hay demasiadas causas de régimen de obligación alimentaria en los tribunales y las mujeres tardan hasta dos años, para que les den la audiencia para revisar una pensión de alimentos”.
Estamos tratando de trabajar en la reinserción laboral de estas madres, haciendo enlaces con el empresariado neoespartano para que nos contacten y brindemos a estas mujeres la oportunidad de retomar su vida nuevamente. Finalmente Cristina Conti instó a las mujeres víctimas de cualquier tipo de maltrato a denunciar en primer lugar, además de acudir al centro de atención para que reciban la ayuda y orientación de manera gratuita y estrictamente confidencial.
(Desirée Depablos/CNP 4.762)
Parte del equipo de la Fundación Nueva Mujer Margarita, Magaly García, Mónica Gibrán, Silvia Barroso, Cristina Conti y Noraida Matos
